Por sexto año consecutivo, durante el mes de mayo, se lleva a cabo en nuestro destino el Vallarta Pride, la gran fiesta del orgullo gay que, a través de una serie de eventos y actividades culturales, sociales y de entretenimiento; celebra la diversidad sexual. Cada año, este magno evento atrae a más participantes nacionales y extranjeros, contribuyendo a consolidar a Vallarta · Nayarit como el destino LGBT por excelencia en México y uno de los hotspot más importantes a nivel mundial.
La comunidad LGBT se ha convertido en un fuerte motor social y económico para nuestro destino (con efectos incontestablemente visibles en la industria de los bienes raíces), que ha visto como una gran parte de la inversión, principalmente en algunas partes de la ciudad, proviene de lo que popularmente se conoce como “dinero rosa”. Por este motivo, nos acercamos a varias personalidades del sector inmobiliario de Vallarta · Nayarit (Jorge Guillén de Tropicasa Realty, Ryan Donner de Timothy Real Estate Group, Daniel Álvarez de Boardwalk Realty y Francisco Ríos de Elengorn Realtors), quienes dan su opinión acerca del peso de esta comunidad en el tejido socioeconómico y su idiosincrasia, así como los beneficios para las agencias de trabajar por y para el segmento LGBT.
Un Destino muy Atractivo
A nivel internacional, Puerto Vallarta sigue creciendo como destino gay friendly, pero no es fruto de la casualidad. Además de sus atractivos (comunes para todos los segmentos) como su belleza natural, calidad de vida, servicios, gastronomía, entretenimiento y una amplia infraestructura inmobiliaria para todos los presupuestos, ¿cuáles son los factores clave que atraen a la comunidad LGBT?
De acuerdo con Jorge Guillén, “es muy visible el grado de apertura y aceptación de la sociedad hacia diferentes ideologías, nacionalidades y circunstancias. Todo el mundo puede convivir en cierta armonía. Además de ser open mind, Puerto Vallarta ofrece muchísimas actividades para todo el mundo, así como comercios y entretenimiento específicamente orientado a este segmento. Es algo que no encuentras en otros destinos”. Ryan Donner añade también el factor de asequibilidad. “Para los estadounidenses, los precios de Puerto Vallarta, con una increíble oferta nocturna y gastronómica, han convertido a la ciudad en un nuevo hotspot contra destinos LGBT clásicos en su país de origen, como Palm Springs o Fire Island, que ofrecen infraestructuras similares, pero donde los precios son mucho más elevados”.
Zona Romántica: Objeto de Deseo
Desde hace varios años, la colonia Emiliano Zapata (principalmente áreas como Olas Altas y Zona Romántica), es el epicentro LGBT de la ciudad, donde han florecido innumerables amenidades, servicios y negocios (bares, cafés, restaurantes, hoteles, boutiques, espacios culturales, artísticos y de entretenimiento), específicamente orientados y/o abiertos a esta comunidad. Además, Playa Los Muertos es uno de los puntos de encuentro más emblemáticos. Según nuestros profesionales entrevistados, estas características han generado un cierto sentido de comunidad e identidad y es la razón por la que existe una alta demanda de propiedades en esta zona.
El impulso constante a la actividad social, cultural y comercial, en armonía y convivencia con residentes y comerciantes de la zona, ha propiciado el resurgimiento en los últimos años de la Zona Romántica. Al respecto, Francisco Ríos asegura que “la comunidad LGBT ha sido de vital importancia para el resurgimiento de la Zona Romántica, pues al convertirse en un sitio de su preferencia, se activan los negocios y promueven la generación de otros nuevos, que a su vez son atractivos para la comunidad LGBT. Esto propicia un desarrollo local muy interesante”. De hecho, esto también es extrapolable al incremento de nuevos y modernos desarrollos en esta área de la ciudad en los últimos años.
El Mercado: ¿Cómo es y Qué Busca?
“Los compradores son mayormente de nacionalidad estadounidense y en segundo lugar canadienses —y en menor medida nacionales—; de sexo masculino, con un poder adquisitivo entre medio–alto y alto —para estándares socioeconómicos de su país de origen—. En cuanto a arrendatarios, mayormente son canadienses —y en segundo lugar estadounidenses—, de sexo femenino y masculino por igual, con un poder adquisitivo medio y medio-alto”, indica Francisco Ríos. Un dato interesante es que muchos de los compradores adquieren propiedades en forma de inversión, las cuales disfrutan durante temporadas vacacionales, pero rentan durante todo el año para obtener ingresos.
En cuanto a la edad, Daniel Álvarez y Jorge Guillén confirman que se sitúan en un rango de entre 40 y 65 años, aunque apunta Ryan Donner que “la tendencia en edades está cambiando. Si bien en su mayoría siguen llegando clientes a partir de los 40 años, recientemente hemos observado a personas de 30 a 40 años, principalmente por la oferta cada vez más moderna del destino”. Otro factor a tener en cuenta es que gran parte de esta comunidad cumple con lo que se conoce como DINK (double-income; no kids o doble ingreso sin hijos), por lo que cuentan con más holgura económica.
Con respecto a las características que buscan en las propiedades, Francisco Ríos comenta que son principalmente condominios con arquitectura contemporánea a precios muy asequibles con acceso fácil a diversión, arte, cultura, gastronomía y playa; si necesidad de tener que trasladarse en automóvil. Se trata de condominios en nuevos desarrollos, con dos recámaras, dos baños y un rango de precios que oscila entre los $350,000 y $500,000 USD. Varios compradores también optan por lugares cercanos, como El Centro o la colonia 5 de Diciembre, donde los precios llegan a ser más asequibles.
Según Jorge Guillén, “ahora existe una gran demanda por edificios que ofrecen amenidades como gimnasio, alberca, seguridad dentro del propio condominio y terraza desde la cual puedan compensar el hecho de que, si no tienen vistas al mar desde su propia ventana, al menos vivan en un lugar con áreas comunes espectaculares y amenidades bonitas”.
Una “Minoría” de Gran Impacto para la Industria
“Aunque no es el mercado más grande en términos generales, es un segmento muy importante dentro de la industria inmobiliaria al que todas las agencias deberían tener muy en cuenta. En el caso de la Zona Romántica, fácilmente supera el 50 % de la cuota de mercado”, comenta Jorge Guillén. Ryan Donner coincide: “Personalmente, la clientela gay representa hasta el 60 % de mi cartera. No es algo que yo o la agencia busque expresamente, pero se da de forma natural debido a la ubicación de nuestra oficina. De hecho, existen varios agentes en numerosas agencias que sí se enfocan en este mercado y los clientes LGBT pueden llegar a representar hasta el 90 % de sus negocios”. Francisco Ríos añade que “al ser una comunidad en franco crecimiento y que ha tomado gran importancia en el destino, la industria de los bienes raíces se ha visto fortalecida al generar la solución a las demandas de compra o renta de propiedades de esta comunidad”.
Es por ello que muchas agencias inmobiliarias realizan esfuerzos promocionales y publicitarios enfocados en este nicho. “En nuestro caso, tenemos varios anuncios en revistas especializadas en la comunidad LGBT. Gracias a ello, un gran número de prospectos llegan a nosotros”, comenta Daniel Álvarez. Francisco Ríos menciona que “la comunidad LGBT es de gran importancia, a la que prestamos mucha atención. Para algunos desarrollos, hemos hecho campañas dirigidas a esta comunidad y hemos obtenido gran aceptación, convirtiéndolos en favoritos de este segmento”.
Más que un Negocio: El Sentido Comunitario
Lejos del aspecto comercial, tanto Ryan como Jorge, Daniel y Francisco confirman la importancia de inmiscuirse con la comunidad LGBT, tanto a título personal como a través de las agencias.
“Implicarse en actos sociales y apoyar a la comunidad es un deber. Por cuenta propia, varios agentes pertenecemos a asociaciones civiles como ACT LGBT (Asociación de Comercio y Turismo LGBT), que ayudan a fomentar y promocionar la importancia de esta comunidad como un motor social y económico en la ciudad. Aunque las posibilidades de obtener negocios y ganancias son altas, eso no es lo más importante. En mi caso o en el de nuestra agencia, participamos en cuestiones comunitarias por convicción”, finalizan.