El mercado que vive un retiro activo

Sarah ElengornDesde hace algunos años, diversos medios de comunicación internacionales como el Huffington Post y la revista especializada Live and Invest Overseas, han incluido a Puerto Vallarta en la lista de las mejores ciudades del mundo para retirarse. Aunque aquí reside una de las comunidades de jubilados extranjeros más grandes de México, una nueva realidad ha traído más servicios e infraestructura al destino, permitiendo que cada vez sean más los extranjeros que llegan con el propósito de vivir un retiro activo. Se trata de la Generación X (los nacidos entre 1960 y 1984), quienes ven en la ciudad un lugar para disfrutar de prolongados días de descanso o como un sitio en el que pueden vivir permanentemente y continuar su desarrollo profesional.

Sarah Elengorn, presidenta de una de las agencias inmobiliarias más prometedoras de la región, compartió sus impresiones acerca de este mercado específico: “Este segmento está creciendo significativamente. Las personas de entre 40 y 50 años, que gracias a las herramientas tecnológicas pueden trabajar desde cualquier lugar, están haciendo estos cambios en su vida antes de tiempo. Es emocionante verlo, porque nos ayuda a redefinir la ciudad como un excelente lugar para el retiro y vivir bien durante la edad productiva”.

Tanto en las ventas de sus listados como en las de Zenith (su más reciente desarrollo), ha notado una importante presencia de este tipo de clientes que buscan entrar en la dinámica de la ciudad. Ella misma es un ejemplo de esto: originaria de Londres y graduada en Estudios Europeos por la Universidad de Bath en Reino Unido, llegó a Puerto Vallarta en 2003 como voluntaria de un programa de servicio social internacional y, desde entonces, ha sido una residente de tiempo completo. Con el tiempo se involucró en la industria de los bienes raíces (comenzando como asistente de un agente local) hasta fundar su propia marca en un período menor a diez años.

“Fue interesante comenzar desde cero. En lugar de haber sido una desventaja, me ayudó a entender y dar un trato de calidad a los clientes, porque a veces ellos llegan sin conocimiento de lo que les estás hablando y entonces tienes que guiarlos, como me guiaron a mí”.

De hecho, ese trato personalizado es al que atribuye el éxito de su empresa y confiesa que otro aspecto que le ha ayudado a posicionarse es la relación que ha entablado con los desarrolladores y arquitectos con los que ha trabajado: “He tenido la suerte de estar involucrada desde el inicio en todos los desarrollos que he representado, viendo planos y cómo se adaptan a lo que el mercado nos va pidiendo. Afortunadamente, siempre se ha contemplado mi opinión y eso me da gusto, porque si no se toma en cuenta el punto de vista de ventas, se cometería un gran error. Si el proyecto no se vende, no es un éxito, así que tenemos que trabajar de la mano”, finaliza.

Más personalidades de la industria de los bienes raíces en Puerto Vallarta.